Cuaderno "Una huelga de obreros en Vizcaya"
18 x 24,5 cm (lomo de 0,6 cm). 40 hojas (80 páginas).
Las limitadas posibilidades de acción que tuvieron las clases trabajadoras a lo largo del siglo XIX se ampliaron a final de la centuria. Las huelgas se convirtieron en un instrumento de defensa y de lucha política y, durante la década de 1890, se hicieron más frecuentes en las zonas más industrializadas y mineras, como por ejemplo el estallido de huelgas obreras que hubo en Vizcaya y la celebración del Primero de Mayo, donde Vicente Cutanda y Toraya encontró la inspiración para una serie de obras de las que forma parte este monumental lienzo, Una huelga de obreros en Vizcaya (1892). Se reproduce el detalle central de la composición en la portada de este práctico cuaderno con portada texturizada.